Pregúntame cómo IGLive con @sarasedoranki

El Covid-19 nos ha servido en bandeja la transformación de los nuevos líderes. ¡Sí o sí!
Vivimos en sistemas y algunas de las bondades del “pensamiento sistémico” es la ley de compensación y que el bienestar sumado el crecimiento del sistema está por encima del nuestro individual. Desde este prisma cobra sentido los cambios vertiginosos que la pandemia ha generado en el entorno profesional. Digamos que, gracias a ella, sí o sí, la evolución hacia lo digital y la necesidad de potenciar las habilidades blancas o “soft skills” en los líderes está servida como algo prioritario.
La auténtica gestión del cambio es fundamental en este momento que estamos viviendo donde las decisiones ágiles priman sobre quedarnos estancados en el pasado. Cada día me encuentro con más empresas y personas que se han visto desbordadas por los acontecimientos y han sido incapaces (o no están siendo capaces) de reaccionar y evolucionar hacia la “nueva normalidad”.
¿Qué te ha mostrado y te está mostrando la pandemia? Y ahora que lo sabes ¿Qué vas a hacer?
El poder del Coaching Ejecutivo marca esa diferencia entre un directivo líder y ser jefe. La aportación del coaching ejecutivo a una empresa se basa en cuatro tipologías (El gran libro del coaching):
Navidad, un año más cumplido, buenos deseos, reuniones familiares, regalos, metas cumplidas (o no), cambio de año y, nuevas promesas…
(cierra los ojos - es tu momento, respira profundamente) 1,2,3 resetea para ser feliz a tu manera
2018 ¡Quiero sentirme bien y lograr la libertad de ser yo misma!
Vivimos en la era ‘del yo’, del desarrollo personal y del bienestar ¿Quién quiere ser un fracasado, infeliz o estar atado a una vida o familia que no le gusta?
Un plan B es clave para lograr el éxito personal y profesional. ¿Cierras los ojos?, ¿optas por sobrevivir hasta que pase el desastre? o ¿buscas un plan B? A veces la vida nos pone delante situaciones que, aunque eran previsibles, nos bloquean.
El plan B responde a ¿Qué pasa si…?